Los prejuicios de un pueblo.

El viernes pasado llegó a nuestros cines la película “Cerdita” de Carlota Pereda con una enorme Laura Galán (puede ser la actriz revelación de este año) y Carmen Machi en su mejor papel, sobre el bulling en un pueblo de nuestra España más profunda.

Pero esta película no solo denuncia ese acoso que viene de fuera del entorno de la víctima, también denuncia a esos familiares que quieren que sus hijas e hijos se conviertan en los Adonis que nos enseñan cada día la televisión, el cine y las redes sociales. Cerdita pasó por el festival de Sitges y fue un éxito de público.

Realmente es un film que vale la pena disfrutar y ver en familia, para inculcar a las nuevas generaciones, los valores que las redes sociales y la normalidad nos están haciendo perder.

Los prejuicios de un pueblo 1

Otra película que también pasó por la 55ª edición del festival de cine de Sitges, es “Los cinco diablos” dirigida por Léa Mysius, otra mujer que pone el dedo en la llaga de los prejuicios de un pueblo de montaña francés y que habla del bulling hacia una niña, de diez años, que es diferente a los demás y cuyo mundo cambia radicalmente con la llegada de su tía, a la cual no ha conocido en su vida.

Interpretada por Adèle Exarchopoulos, Daphne Patakia y Sally Dramé, “Los cinco diablos” nos habla también de tolerancia hacia la condición sexual de las personas y sobre todo nos habla de la lucha por ser quienes somos en realidad y huir de la prisión social en la que nos tiene encerrado el sistema que han creado la religión, sobre todo la cristiana, y lo más importante, escapar del sistema capitalista que es la peor religión de todas.

Dos auténticas maravillas para disfrutar en la gran pantalla de un cine.

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